Por fin se estrenó en Lima la tan esperada nueva versión de uno de los superhéroes más famosos de la historia, “Superman Returns”, esta vez de la mano de Bryan Singer, y protagonizado por el actor, ahora famoso Brandon Routh y el ganador del Oscar, Kevin Spacey.
En esta oportunidad el hombre de acero regresa después de un proceso de redescubrimiento personal, dejando a la ciudad Metrópolis, extrañándolo y esperando por su regreso. Cuando este regreso se da, la identidad humana de Superman, Clark Kent, vuelve a su trabajo en el Daily Planet, y ahí busca a la persona que más ama en el mundo, Lois Lane (Kate Bosworth), pero esta ya había seguido con su vida, casándose y teniendo un hijo con Richard, un compañero de trabajo.
Lex Luthor, el archienemigo de Superman, también regresa a la gran ciudad, con la intención de apoderarse de la ciudad y destruir lentamente todo el continente. Con el plan de Lex en camino, Superman tendrá que luchar para salvar la tierra, reconciliarse con la gente que dejó a la hora de su partida y detener el terrible plan que Lex Luthor tiene entre manos.
Bryan Singer, conocido director de las dos primeras películas de X-Men, dejó a un lado la dirección de la tercera parte, por enfrascarse en la aventura de hacer una nueva versión de Superman. El tratamiento de la historia acompañado de la experiencia de Singer en los cómics, hace de esta película, algo fascinante. Fuera de los efectos especiales (que son increíbles), la sensibilidad de los personajes y el carácter de cada uno frente a las situaciones pasadas y presentes en sus vidas, están tratadas perfectamente por Bryan Singer.
El novel actor Brandon Routh encaja perfectamente con el personaje. Podría arriesgarme a decir que es mejor Superman que Christopher Reeves, por la gestualidad y actitud que tiene, cosa que le faltaba al recordado Reeves. Por otro lado, el personaje de Lois, hace el contrapunto, ella es la ofendida, abandonada y triste reportera, que pone todas sus desgracias sobre la mesa por la culpa del superhéroe.
Hay que recalcar en un párrafo aparte la presencia del extraordinario Kevin Spacey. El personaje parece que hubiera sido hecho para él, y el casting en esta ocasión es perfecto. La presencia imponente en la pantalla, más la fabulosa actuación, le dan a la película algo muy especial y positivo.
La música de John Ottman es potente, esperanzadora, emotiva y excelente. Lamentablemente para él, la presencia del tema principal de la película, compuesto por el mejor de todos, John Williams, hace que al salir de la sala, solo tengamos la melodía principal y no los temas de Ottman.
En general, Superman Returns es una gran película, que cumple con las reglas de la aventura, la acción, la comedia, y el entretenimiento, reglas esenciales al momento de adaptar un cómic, y mucho más, de alguien tan querido y famoso como Superman. Disfrútenla en el cine, porque no hay nada como verlo en pantalla gigante, acompañado de un gran sonido.
2 comentarios:
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