Mariposa Negra: Lombardi y Montesinos

Las películas peruanas llegan a las salas nacionales cada vez con más frecuencia y eso alienta a pensar que tal vez, el verdadero cine peruano está naciendo para darnos una gran alegría a los que amamos el sétimo arte. “Mariposa Negra” de Francisco Lombardi fue estrenada la semana pasada con un previo de elogios y premios.

La película cuenta la historia de Gabriela (Melania Urbina), una profesora de historia en un colegio de Lima, que ve su vida girar rápidamente cuando se entera que su novio Guido (un juez anticorrupción) fue asesinado de manera salvaje por un grupo de matones mandados por Vladimiro Montesinos, en el momento en que el Perú vivía una visible corrupción.

Gabriela decide buscar al responsable de este asesinato (Montesinos), y se une con Angelita (Magdyel Ugaz), periodista y redactora del diario chicha “El Papi”. Tomada esta decisión, Gabriela dará todo lo que esté dentro de sí para vengar la muerte injusta de su novio.

Francisco Lombardi, siempre queriendo dar su punto de vista sobre la realidad nacional y los eventos que en este “cinematográfico” país suceden, nos entrega desde adentro, una situación vivida en muchas oportunidades por el poder que tenía el “Doc”.

La historia es dura, pesada, dramática. Melania Urbina, en una de sus mejores actuaciones, se entrega completamente al personaje y sus motivaciones. Sobrepasa todo límite imaginable y hace lo que sea para lograr sus objetivos, lo que la obliga a tener cambios en su estado de ánimo, en su personalidad y en imagen personal. Melania, con experiencia actoral reconocida, se mete en el personaje y le saca el jugo a las situaciones que se le presentan, dando una extraordinaria interpretación.

Magdyel Ugaz empieza una carrera en un lenguaje complejo como es el cine, y aborda esa experiencia con mucha dedicación. Su personaje si bien es igual en toda la película, tiene momentos de choques internos muy bien expresados por Magdyel y bien recogidos por Lombardi.

Para cerrar con el reparto principal y femenino, Ivonne Fraysinnett es extraordinaria y le da a su personaje una carga media cómica y dramática que es tan agradable para un lenguaje cinematográfico. Ella es la clave para que la historia tenga su giro más importante e Ivonne asume esa responsabilidad con el profesionalismo y la experiencia que solo ella puede tener.

A nivel de historia la película cumple con ser buena. La narración de un director experimentado como Lombardi se ve durante toda la cinta, pero como nada es perfecto, hay momentos dentro de la cinta que suceden muy rápido o que no tienen sutileza al ser mostradas (léase primera imagen de Montesinos, risas del público en el cine). Sin embargo, los encuadres y el ritmo están perfectos para el tema, al igual que la fotografía, llena de claroscuros y de sombras que le dan esa onda turbia y oculta que la trama amerita.

En general, Mariposa Negra es una película que demuestra que el cine peruano va para adelante y que nos da la esperanza, al igual que Madeinusa, de que en Perú se puede hacer cine de exportación. Con la luchada ley para el cine, todo sería mucho mejor. Las pruebas están en cartelera.