Scary Movie 4: La peor de la trilogía

Se estrenó en Lima hace un par de semanas la cuarto y última parte de la trilogía de humor y terror, Scary Movie 4.

En esta oportunidad se hacen parodias de las películas más de moda de los últimos años. La Aldea, Guerra de los Mundos, The Grudge, Saw, Million Dollar Baby, Brokeback Mountain y además, un segmento del programa de Oprah.

Cindy Campbell (Anna Faris) encuentra un trabajo cuidando a una señora que no se puede mover, y va a vivir con ella en una casa que tiene algo extraño. Como vecino tiene a Tom Ryan (Craig Bierko), un despreocupado padre que tiene que mantener a sus hijos a salvo de extraterrestres que vienen a destruir la tierra.

Pueblos escondidos, juegos macabros, y la invasión alienígena a la tierra, darán el ambiente para esta película, que sin lugar a dudas, da mucha diversión y entretenimiento a los espectadores.

La película es dirigida nuevamente por David Zucker, que hizo de la tercera, la mejor Scary Movie, para la crítica estadounidense.

En esta oportunidad la película no tiene sentido. El humor parece que no ha sido tratado por el director y ha utilizado recursos tan baratos como los golpes y el exceso de estupideces, recursos que considero una falta de respeto al espectador, que espera un humor más elaborado y con estilo Scary Movie, que se pudo ver en las tres primeras entregas.

Anna Faris es la insignia de esta saga, ella con su dulce ingenuidad, acompañada con la cada vez más desesperante Regina Hall, se unen a Craig Bierko, para formar el trio principal de la película, pero que no resuelven ni llenan los espacios vacíos de un guión fallido.

Las risas abundan y la diversión es inevitable, pero definitivamente no es la mejor película de la franquicia de Scary Movie, y me parece un gran acierto, que los productores hayan dicho que esta fue la última película de la saga, ya que parece que hasta ellos se han dado cuenta, que esto no da para más.

Buena película para disfrutar un domingo en casa, pero a pesar del éxito de taquilla, no creo que tenga éxito en el corazón de la gente.