lunes, 13 de febrero de 2006

La Mujer de mi Hermano: De la novela al cine


Después de un gran éxito en la taquilla mexicana, llega a la cartelera limeña la versión cinematográfica de “La mujer de mi hermano”, novela del mismo nombre escrita por Jaime Bayly, y en esta oportunidad dirigida por el peruano Ricardo de Montreuil, producida por Stan Jakubowicz y escrita por el mismo Bayly.

“La mujer de mi hermano” cuenta la historia de Zoe (Bárbara Mori), una mujer cansada y aburrida de tener una relación monótona con su esposo Ignacio (Christian Meier), quien no hace el más mínimo esfuerzo por complacer en todos los aspectos a su esposa. Por tales motivos, Zoe va en busca de Gonzalo (Manolo Cardona), hermano menor de Ignacio y pintor de profesión. Gonzalo es de las personas que no tiene aspiraciones en la vida e Ignacio ve en él a un vagabundo que se aprovecha del dinero que le da mensualmente.

Ante tanta pelea matrimonial y la falta de deseo sexual que tiene Ignacio con Zoe, ella cae en la tentación y en los brazos de Gonzalo, lo que genera una serie de mentiras y engaños entre el triángulo amoroso formado por los protagonistas.

La película mantiene al espectador atento. Se nota el trabajo del director con los personajes, porque a pesar de no haber mucha acción, cosa que es típica en películas latinoamericanas, los protagonistas tienen fuerza y llevan el ritmo de la película con sus actitudes internas y sentimientos encontrados. Bárbara Mori hace de Zoe una mujer llena de miedos e inseguridades, al estar casada casi por compromiso que por amor. Christian Meier como Ignacio, nos muestra a un esposo con problemas personales internos, miedo a decir la verdad y con una debilidad que se nota a lo largo de toda la película. Ignacio es el personaje que más logra entender el público, sin aceptar sus acciones, el espectador llega a sentir pena y estar un poco identificado con él. Manolo Cardona hace de Gonzalo, una persona sin responsabilidades, que quiere la vida fácil y que no desaprovecha ninguna oportunidad de fastidiar a Ignacio, y en este caso es quitándole a su esposa.

Las actuaciones son convincentes y creíbles. Un gran acierto es la elección de los personajes secundarios que acompañan al trío protagónico, especialmente Boris (Bruno Bichir), el amigo homosexual de Zoe. Él pone la cuota de comicidad en la película y es el confidente de Zoe, lo que hace un poco más dinámica la historia y pone ciertos parches para una mejor narración. Beto Cuevas como el padre Santiago, aunque tiene poca participación, ayuda con un par de escenas a entender los problemas de la pareja protagónica y a entrar en los sentimientos de los mismos. Angélica Aragón es la madre de Meier y Cardona, tiene pocas intervenciones, pero le dan un poco de ligereza a la película y la descargan de tanto drama emocional.

La dirección se puede considerar buena, especialmente la dirección de actores, porque a falta de acciones, Ricardo de Montreuil trabaja bien las emociones de sus personajes. La fotografía es fría y refleja el ambiente denso y dramático que se vive. Algo que se puede considerar un gran acierto de la película, es la elección de la música, orquestada con toques contemporáneos acompañan las acciones y las alimentan con una carga emotiva importante para el desarrollo de la película.

Siendo la ópera prima de Ricardo de Montreuil, podemos decir que este joven director está preparado para asumir nuevos retos cinematográficos y superarse a él mismo en sus próximos trabajos, porque “La mujer de mi hermano”, con sus altibajos, es una película con mucha fuerza en los personajes, digna de verse y de sacar sus propias conclusiones.

1 comentario:

Sex Shop dijo...

Muy buenoooo!!!!!!!!!